El genocidio de Paracuellos fue la mayor masacre que se produjo durante la Guerra Civil. Es cierto que en la guerra se mata o se muere, pero esto no ocurrió en el frente, fue en la retaguardia.
La guerra había comenzado, pero el frente estaba muy lejos. En Madrid no había guerra, no había quinta columna, ningún problema de orden público, los rebeldes ya habían sido fusilados en La Moncloa en los primeros días del Alzamiento y, sin embargo, en las cunetas de Paracuellos fusilaron entre 4.000 y 7.000 personas de las cuales 649 eran menores de edad, simplemente por ir a misa o por tener familiares que iban a misa o por ser significativamente de derechas, pero siempre católicos, curas o no curas, pero católicos.
No habían cometido ningún delito. No llevaban armas, no estaban en el frente. Los asesinos no eran soviéticos, eran españoles. El responsable fue el Gobierno del Frente Popular de Largo Caballero, siendo Santiago Carrillo el consejero de Orden Público de la Junta de Defensa en Madrid. El motivo implantar el terror, como en la Revolución soviética, que consiste en matar, no al enemigo, sino al que no ha hecho nada. Es el exterminio de clases. Había que eliminar a los burgueses.
Los milicianos obligaron a los vecinos de los pueblos, a punta de pistola, a cavar las fosas, trasladar los cuerpos y echar algo de tierra por encima. En las cunetas, descalzos porque les habían quitado las botas, atados de dos en dos para que no se pudieran mover, los ametrallaban y después decían que se habían marchado a Valencia. Allí quedaron amontonados en 7 fosas comunes. Ningún crimen del franquismo fue comparable.
Cuando las autoridades de la Dictadura fueron a pedir el traslado de los restos al Valle de los Caídos los familiares se negaron. Dijeron que a los muertos hay que dejarlos descansar en paz y que ya estaban bien allí, junto a sus compañeros. Franco respetó su decisión e incluso la mayoría ni siquiera fueron identificados.
No hay ninguna película sobre Paracuellos porque el franquismo renunció a la propaganda. Pensó que, al fin, los dos bandos eran españoles y era preferible que se olvidara. En el fondo todos pensaban que nunca más una guerra civil. Nadie quería recordarla.
Con todo, lo peor de Paracuellos es que justificó el Alzamiento
Enrique Gómez Gonzalvo, 14-02- 2023 Referencia 649
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