Al contrario que Gustavo Bueno que decía que era más importante ser español que europeo, los españoles están fascinados por la idea de Europa desde el año 1425, fecha en la que desembarcó en Laredo Carlos I. Desde entonces no ha habido una nación más europeísta que España y la fe en su futuro es incluso mayor que la de la propia Alemania, que es la que manda. Aquí, al contrario que en Francia, no es euroescéptica ni la extrema derecha ni la extrema izquierda.
Es cierto que la Unión Europea que surgió de la necesidad de pacificar Europa ha tenido éxito. Ha conseguido que, después de haberse matado con furor durante siglos, se evitaran las guerras civiles, pero muchos historiadores piensan que tanto Europa como La Unión han llegado al límite.
Actualmente hay un deterioro en nuestra cultura occidental que se manifiesta en la educación, en la baja natalidad, en la incapacidad de controlar la deuda, en el crecimiento de la extrema derecha, en los problemas que plantea la inmigración ilegal. También en el endeudamiento, en la sobrecarga de impuestos y en la incapacidad de los estados para frenar los nacionalismos regionales.
En marzo del pasado año el endeudamiento de la eurozona era del 86 % del PIB, destacando por este orden Grecia con el 176 %, Italia 137, Portugal, España 115 Francia 101. En España, hemos sobrepasado el máximo endeudamiento que se produjo tras la guerra de Cuba.
Los altísimos impuestos que exige el estado de bienestar han determinado un bajo crecimiento económico, al contrario de lo que ocurre en los países asiáticos. Este bajo crecimiento provoca el descontento de la población que se manifiesta en un aumento de los populismos.
Además, según Roca Varela, tanto en España como en casi toda Europa hay un peligro evidente de balcanización. Afirma que la multiplicación de pequeños poderes locales debilita los estados y hay peligro de colisión entre ellos. Esto ocurre en el Reino Unido con Escocia y País de Gales, en Alemania con los 16 estados federados llamados landers, en Italia con 19 gobiernos regionales aparte de la Liga Norte. Italia es el primer año que en las escuelas sicilianas se enseña en siciliano y en Francia, en las zonas de Languedoc han desaparecido en las carreteras los carteles en francés.
Según el diario El Confidencial, Holanda se ha convertido en un paraíso fiscal y el sistema holandés le cuesta al resto del mundo 22.000 millones de euros en ingresos fiscales evadidos. Según la policía alemana Holanda es un narco estado y la Unión Europea no hace nada.
Para los más pesimistas la gran cultura de la filosofía, las catedrales, las sinfonías, la pintura, el derecho, la libertad, la razón y la ciencia podría desaparecer.
Enrique Gómez Gonzalvo 1-09-2022 Referencia 597