
El izquierdismo es una religión como otra cualquiera, con sus dogmas, sus obispos, sus excomuniones sus inquisiciones y sus grandes profetas (Lenin, Stalin, Mao) cuyos cuerpos permanecen embalsamados.
Ambas, izquierdismo y religión son contrarias a la razón, entrañan una fe desmedida en sus postulados, proclaman su superioridad moral y no admiten razonamientos en contra. Son inatacables bajo pena de excomunión y legitiman a sus fieles para descalificar a los críticos directamente con el insulto, sin necesidad de argumentos.
Las dos se basan en la fe y tienen respuesta para todo. Están convencidos que están en posesión de la verdad. No hacen como los científicos que revisan constantemente sus teorías y corrigen sus propios errores.
Ambos practican el adoctrinamiento, para conseguir la transformación social de la sociedad. Tratan de transmitir su doctrina a otra persona, intentando que el adoctrinado no razone críticamente para que lo acepte sin reparos. La razón es inútil, Solo importa la fe.
El comunismo incluso, dando un paso más, dice que su socialismo es ciencia. Es el “socialismo científico” del que hablaban Marx y Lenin.
Unos prometen el cielo y otros un paraíso en la tierra donde no habrá clases sociales, ni dinero, ni Estado. Dan un consuelo ficticio y exigen obediencia ciega a sus jerarquías.
El hombre nuevo que ha pretendido crear el comunismo es el equivalente al hombre nuevo que prometió el Cristianismo.
Todos tienen su propio pontífice al que llaman el gran padre o dictador y que eligen en un concilio cuando el dictador muere, aunque en algunos casos es hereditario y suele tener poderes divinos.
Estas semejanzas hacen que, cuando los cristianos pierden la fe, muchos buscan el sustituto en el Partido comunista. Ah tienen la ventaja que, si eres comunista y lo que tienes enfrente es el mal y tú estás contra él, eres superior a todos porque eres bueno.
Pero la similitud solo se da en el aspecto externo. La diferencias reside en «aquello» en lo que se cree. El cristianismo se basa en el amor y el comunismo en el odio. Y sobre todo no se pueden olvidar los 100 millones de muertos del comunismo.
Tampoco las religiones son todas iguales. La iglesia católica ha sido históricamente la más racional de todas ellas, no es como el luteranismo que abrió las puertas a largo plazo al relativismo del siglo XX y, según Gustavo Bueno, Lutero nos llevó a los campos de exterminio.
Enrique Gómez Gonzalvo 16-10-2021 Referencia 469