
¿Qué tienen en común la canciller alemana Ángela Merkel, el presidente de Francia Emmanuel Macrón, los representantes de las cinco gran hermanas de internet (Google, Apple, Facebook, Amazon y Twiter) y los numerosos multimillonarios, intelectuales, científicos y expertos de todo tipo hasta un total de 1.500 personas? Que todos ellos se postraron y aplaudieron el discurso del invitado de honor Xi Jumping, presidente de la República Popular de China y secretario del Partido Comunista Chino.
Se da la circunstancia que China está muy lejos de respetar los derechos humanos y, organismos como Amnistía Internacional han denunciado que, recientemente, el gobierno de Jumping ha elevado la represión y ha aumentado las detenciones y el encarcelamiento de disidentes.
Ninguno de los 1500 asistentes le preguntó al ilustre invitado por qué el Gobierno chino ocultó el virus y permitió que volaran aviones durante dos meses desde China al resto del mundo transportando contagiados del Covid-19. Él mismo señaló públicamente que los doctores que informaran sobre el virus podrían ser acusados de espionaje e incluso condenados con la pena de muerte.
El mandatario comunista inauguró la cumbre virtual con un discurso triunfalista y detallando un manual de deberes y órdenes dirigidas a los líderes mundiales, presumiendo de ser la única economía que creció durante la pandemia del coronavirus y advirtiendo que “el mundo ya no será como antes”.
Dejó claro que China ha salido vencedora de la tragedia sanitaria mundial e instó a los países a seguir su ejemplo. “En China estamos siguiendo el camino hacia un país socialista moderno. Ahora desempeñaremos un papel más activo para fomentar una globalización económica mundial que sea más abierta, inclusiva, equilibrada y beneficiosa para todos”..
Al añadir que “nada volverá a ser como antes” debe entenderse que China ya no admitirá que ningún país, empezando por los Estados Unidos, discuta su poder militar, económico, político, o sea, su dictadura comunista.
El objetivo, detallado en la Agenda 2030 del Foro Económico Mundial, es instaurar un socialismo global, es decir, el comunismo. “En 2030 no poseerás nada y serás feliz» reza uno de sus polémicos eslóganes bajo el título de «El gran Reinicio» feliz”, reza uno de sus polémico eslóganes bajo el título de El gran reinicio.
Esos multimillonarios asistentes ¿estarán tan encantados como Macrón cuando afirmó “saldremos de esta pandemia sólo con una economía que piense más en las desigualdades”; “el modelo capitalista, la economía abierta no pueden funcionar en este entorno”; “el capitalismo ha garantizado hasta ahora el crecimiento, pero al precio de la desigualdad”?
Enrique Gómez Gonzalvo 3-08-2021 Referencia 636