
Hay que admitir que en España la democracia la trajeron los franquistas pues la Segunda República, que empezó quemando iglesias y terminó asesinado al Jefe de la Oposición Leopoldo Calvo Sotelo, no era un régimen democrático.
En la época de la Transición el mundo estaba en plena ebullición por la Guerra fría. Ya en los años 60 había habido un florecimiento mundial del terrorismo. El 50-70 % de la prensa mundial estaba a favor de las Brigadas rojas, de la banda Baader-Meinhof, de los montoneros y del Che Guevara. Portugal, recién salido de una dictadura parecida a la española, había estado a punto de caer en un sistema comunista.
España era la octava potencia industrial del mundo porque la segunda etapa del franquismo había sido de una prosperidad económica extraordinaria. Se trataba de un país de pequeños propietarios con una amplia clase media y los españoles, de uno y otro signo, querían vivir en paz y olvidar la Guerra civil.
La única oposición, puesto que el PSOE no existía, era la del PC de Santiago Carrillo. Su proyecto, el llamado Pacto por las libertades, se basaba en que franquistas y antifranquistas superaran la guerra civil y llegaran a la amnistía y a la democracia. Luego, dentro de muchos años, se intentaría la transición al socialismo.
El PSOE refundado, financiado por los alemanes con dinero de la CIA y de los sindicatos americanos, se sumó al proyecto democrático de Adolfo Suárez que contaba con el apoyo de los militares.
Finalmente los franquistas que tenían las cortes, el ejército, la policía y la guardia civil, renunciaron al poder. Se hicieron el harakiri en las Cortes y pactaron con el Partido comunista de Santiago Carrillo la instauración de un régimen democrático.
Finalmente el 15 de junio se celebraron elecciones democráticas, las primeras en las que se respetaba al adversario político. En 1978 se promulgó la Constitución, que ha sido la de mayor consenso en toda la historia de España.
En estos 40 años ha gobernado la derecha y la izquierda y la democracia se ha mantenido, pero la libertad no ha sido plena. En el País Vasco se han producido más de 1.000 asesinatos, miles de heridos y 200.000 vascos han tenido que huir del terrorismo. En Cataluña, como predijo Tarradellas, hay una dictadura blanca mucho peor que la franquista. En el País Vasco, Navarra, Galicia, Baleares, en parte de la Comunidad Valenciana, además de en Cataluña, no se puede estudiar en español.
Actualmente la pinza formada por los separatistas y el gobierno social comunista de Pedro Sánchez puede terminar otra vez con nuestro régimen de libertades.
Enrique Gómez Gonzalvo 31/07/2021 Referencia 430