SUPERIORIDAD MORAL DE LA DERECHA

                      

La izquierda, a pesar de los muertos que tiene encima,  se ha adjudicado la  superioridad moral y lo más sorprendente  es que  la derecha lo ha aceptado.  Ellos se consideran las mejores personas del mundo porque  se dedican a hacer el bien y  creen que la derecha  será siempre mala.

Garzón dijo que  una persona que roba, que extorsiona, que utiliza los fondos públicos, no puede ser de izquierda. Anguita afirmaba  que un político, para ser de izquierdas, tenía  que predicar con el ejemplo. ‘Para mí, un señor que levanta el puño y tiene tres cadillac es un farsante, aunque la gente lo vote’, insistió. Un Bardém ha dicho  que él, es «moralmente superior» a cualquiera de derecha.

La realidad es muy diferente.  El socialismo es malvado y el comunismo asesino. Pero, como sus intenciones son buenas, quieren que se les perdonen sus fechorías.

El complejo de la derecha viene de finales de la Restauración.  La sensación de haber perdido la superioridad moral tiene relación con el abandono de la tradición y la moral  católica y con dejar de creer que  la propiedad es legítima. Lo contrario, la ilegitimidad de la propiedad es la base del socialismo.

Fue también cuando cuando se olvidó y se perdió la conexión con la Escuela de Salamanca, la gran escuela del pensamiento español y se empezó  a copiar a Francia. Y también cuando se produjo un avance del anticlericalismo, ante el cual la Iglesia no es que se rindiera,  pero se negó a dar la batalla y se aisló mientras la izquierda iba avanzando en todos los frentes.

Desde entonces la derecha vive acomplejada, sumida en su complejo de culpa, que suele ser  muy intenso en sociedades de fuerte tradición católica.

Esta es la razón por la que que la CEDA,   donde estaba la gente que iba a misa, renunciara a gobernar en el 36  a pesar que había ganado las elecciones y tenía toda la legitimidad para presidir la  Jefatura del Gobierno. La renuncia pudo ser una de las causas del desencadenamiento de  la la Guerra Civil.

En la actualidad, aunque la izquierda  es solo corrupción, totalitarismo y lavado de cerebro,  nada ha cambiado. El complejo persistirá  mientras los políticos de la derecha tengan pánico a que les llamen extrema derecha y se sigan calificando de centristas. Han de estar convencidos que tienen derecho a la victoria, a  gobernar y la obligación de sacar a España de la ruina y del peligro de su disolución como nación en el que la ha sumido la izquierda.

       Enrique Gómez Gonzalvo 25-07-2021 Referencia 443


Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s