El violador es en potencia un asesino en serie y muchos asesinos en serie comienzan siendo violadores.
El asesino en serie es un arquetipo que aparece en todas civilizaciones y en todas las épocas. Se trata de niños que ya a los 6-10 años se muestran exigentes con sus padres, con explosiones coléricas y ataques de rabia, siempre intentando salirse con la suya y no soportando que se les lleve la contraria. Se divierten arrancando las alas a las moscas, matando o torturando al gatito del vecino o pegando a un niño más pequeño. Comienzan pronto a mentir, engañar y manipular. Si son descubiertos no se ponen nerviosos, tienden a negar todo y no experimentan ningún tipo de remordimiento. Un poco mayores, chantajean a sus padres, abusan de una niña, pegan a la abuela para sacarle dinero y pueden llegar a la violación y hasta el asesinato.
Esta es la descripción del psicópata, aunque, naturalmente no todos ellos terminan siendo violadores en serie.
El violador es con frecuencia un psicópata. Es el llamado trastorno de personalidad antisocial, que hace que quien lo padece es incapaz de empatizar con otros seres humanos y de sentir remordimientos. Suelen considerar al resto de las personas como si fuesen objetos a los que utilizan para conseguir sus propios objetivos. Si hacen algo en beneficio de alguien o de alguna causa aparentemente altruista es sólo por egoísmo, para su único y exclusivo beneficio.
A pesar de que la imagen más popular del asesino en serie, como en las películas de terror, la mayoría de ellos no lo son.
Todos conoceremos 1 ó 2 psicópatas a lo largo de nuestra vida y, aunque con frecuencia pasan inadvertidos para la mayoría de la gente e incluso parecen personas encantadoras, casi todos ellos causan dolor en su entorno y suelen estar detrás de muchos casos de acoso sexual, laboral, de maltrato doméstico y de agresiones de todo tipo.
No son enfermos, conocen la ilegalidad de sus actos y si llegan a la violación lo hacen porque el poder que ejercen sobre un ser indefenso, les produce placer y el acto de máximo poder es el asesinato.
Unos neurólogos norteamericanos han encontrado que el área del cerebro relacionada con la sensación de recompensa o de placer es más activa en el caso de estos psicópatas.
La causa es desconocida. Su incidencia es el 1-2 % de la población y del 10-15 % entre los reclusos. Más frente en el varón en proporción 3 a 1.
Enrique Gómez Gonzalvo 19/07/2019 Referencia 406