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FELIPE GONZÁLEZ
Presidente de Gobierno de 1982 a 1996. Fue el niño más querido y más valorado durante la transición y el político más importante del PSOE del siglo XX. Aun hoy sigue siendo una referencia para muchos socialistas y su líder histórico.
El era una izquierda razonable, reformista, que había renunciado al marxismo y seguía una línea política social demócrata, parecida a la de casi todos los partidos socialistas de la Unión Europea y que podía alternar el poder con la derecha.
Su gestión presenta muchos puntos negativos, pues dejó al país convertido en el paraíso del desempleo y en una cloaca de corrupción. Fue cobarde y miserable en el asunto de los GAL y no hizo como Margaret Tacher que dijo en el Parlamento “¡yo disparé”! cuando le preguntaron sobre los 5 terroristas asesinados por la policía británica en Gibraltar. Claudicó ante los nacionalistas y regaló la sección catalana del PSOE a los señoritos nacionalistas del Partido Socialista de Cataluña.
Fue respetuoso con la nación, con la bandera, con la Constitución, que se fundamenta en la en la unidad indisoluble de la nación española y en que todos los españoles somos iguales ante la ley, no en función de derechos históricos, autonómicos, razas, religión, sexos u opiniones políticas.
RODRIGUEZ ZAPATERO
Presidente de Gobierno de abril del 2004 a diciembre del 2001. Llegó al poder tras la masacre del 11 M cuya culpabilidad endosó al gobierno legítimo de España que era del PP.
Desde que toma posesión rompió con la tradición de consenso y se dedicó a reabrir las fosas de la guerra civil, a establecer un cordón sanitario al PP, a promulgar la ley de memoria historia para que media España fuera excluída de la política. Un partido nacional tiene que representar a todos los españoles, no puede decir que los españoles que no son de izquierda no tienen derecho a nada.
Con su política suicida de entendimiento y cesiones a los separatistas catalanes (“Pascual, apoyaremos en Madrid lo que apruebe el parlamento de Cataluña”) y a los terroristas de ETA (Otegui es un hombre de paz) se cargó en pocos años las señas de identidad de su partido, haciéndolo irreconocible a juicio de muchos de sus potenciales electores.
Con su imagen de tonto amable, diciendo que la tierra no es de nadie y que pertenece al viento, se cree lo que dice y lo que hace. Es el peor enemigo que ha tenido España en varias décadas, después de Pujol.
PEDRO SÁNCHEZ Su ideología es el odio al Partido Popular. Inicialmente presentó un plan de gobierno con Ciudadanos que incluía 150 medidas reformistas y, tras su fracasó, intentó la formación de gobierno con Podemos y los separatistas, que hubiera sido el antípoda del que pretendía construir con Ciudadanos.
Su objetivo era ocupar la Moncloa, al menos por un día y el de su señora por una noche. Ha hecho mucho daño al PSOE de la Transición y de Felipe González, dejándolo irreconocible.
Enrique Gómez Gonzalvo. 6-10-2016. Referencia 173.
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