Recientemente un grupo de “intelectuales” cuyo núcleo dirigente viene de la Complutense, Universidad que no se distingue por estar entre las 200 primeras del mundo sino porque la ideología que predomina es la extrema izquierda y por ser la única universidad de Europa donde se permite que se asalten capillas católicas, mientras se está celebrando misa, por agentes semidesnudas al grito de “arderéis como en el 36.”
Estos profesores agregados, que no catedráticos, se presentan como algo “nuevo” frente a los viejos partidos, pero su ideología el marxismo leninismo, es tan “nueva” que tiene casi un siglo de historia y 100 millones de muertos.
Del jefe supremo, Pablo Iglesias, el catedrático emérito de Ciencias Políticas Ramón Cotarelo con sólida formación intelectual, que fue director de las tesis de Monedero y Errejón, ha dicho a través de su perfil de twiter “va quedando claro que este hombre, además de narcisista y prepotente es tonto”.
A pesar que dijo en un debate televisivo que se había celebrado un referéndum por la independencia de Andalucía, 5 millones de lerdos le votaron. En Andalucía, Pablo, nunca se ha celebrado un referéndum por la independencia, fue un referéndum por la autonomía.
Se disfraza para ir a las Cortes, a la Zarzuela, a la Moncloa o a los óscar, para que quede claro que desprecia a Hollywood y al capitalismo, aunque él cobre de Irán y Monedero de Venezuela. Es difícil imaginarlo al frente del gobierno español con esa coleta, ese desaliño y esa forma de vestir, recibiendo al presidente de Francia o al primer ministro de Inglaterra o dirigiéndose a la nación para afrontar una crisis.
Según el diario ABC, un documento oficial de Venezuela del año 2009 muestra que el gobierno de Hugo Chaves pagó al menos 7 millones de dólares a dirigentes españoles para “crear en España fuerzas políticas bolivarianas” y, efectivamente fundó Podemos, un partido bolivariano y anticapitalista para desestabilizar España y apoyar los regímenes comunistas de Venezuela y Cuba. La financiación de partidos políticos por regímenes liberticidas extranjeros es un hecho de extrema gravedad.
A Pablo, qué le vamos a hacer, le gusta la violencia. “La guillotina es el comienzo de la democracia.” Organizó un escrache a Rosa Díaz en la Complutense. Le gustan la erriko tabernas, se derrite con Otegi. Dice que “sin personas como él no habría paz”, “ETA es la única que entendió la transición” y “en España no ha habido nunca democracia.” Ha votado en el Parlamento Europeo con Marín Le Pen, del Frente Nacional, acabar con el euro y salir de la UE. Y es que Pablo es un demagogo. ”Lo importante no es el déficit, lo importante es que los niños no busquen en los cubos de basura”.
Es un oportunista que no cree en nada y si llegara al poder su único objetivo sería quedarse allí y el camino más fácil es implantar en España una dictadura comunista, como hizo Castro o Hugo Chávez, al que asesoró.
Enrique Gómez Gonzalvo, 20-06-16 Referencia 111
Me parece un artículo muy subjetivo, pobre de argumentos y lejos de la realidad por no decir irrespetuoso, mejor es dejar a Rato que venga impecablemente vestido y nos robe a todos los españoles, es más clarificador el miedo de las élites a que llegue podemos y les arrebate su estatus, clientelismo Y esa penosa manera de perjudicar a los más desfavorecidos
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Pablo Iglesias no es que sea irrespetuoso, es que insulta todos los días. En una entrevista en el diario El País el pasado día 6 decía «los que dan miedo son los hijos de puta»
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